2.2.09

La coronación de Obama

obama_baile_11
De la conmovedora liturgia y auténtica emoción histórica que rodeó el Inauguration Day o toma de posesión de Barack Obama como 44º presidente de los EE.UU, rica en escenas de alta densidad simbólica y fuerte
carga sentimental, especialmente para la minoría negra, es difícl destacar algún elemento de unos actos puntual y minuciosamente reflejados por los medios de comunicación en directo, ya sea en televisión u online.
A nivel técnico, resultaron curiosos y sugerentes algunos experimentos realizados gracias a la asociación entre CNN y Facebook, lo cual permitió aunar el seguimiento online de la ceremonia con la exponencial proliferación de comentarios propia de la red social. Tampoco fueron desdeñables las aportaciones de Google Earth y Goole Eye, quienes, apoyándose en sus posibilidades cartográficas a escala global, ofrecieron asombrosas istantáneas cenitales de la muchedumbre agolpada en el Lincoln Center y alrededores.

obama_baile_2
Más allá del sacro momento de la unción bajo juramento ante la Biblia o del vibrante pero austero y responsable discurso del recién electo presidente, destacó con luz propia el momento de la apertura del llamado Neighborhood Ball, el baile de inauguración de la estancia del matrimonio Obama en la Casa Blanca, cristalización del espíritu y sentido de toda la jornada.
Enmarcados/coronados por un círculo cenital de luz cuyo haz dota a la escena de un hálito mágico-religioso que la emparenta con la Anunciación (la buena Nueva) al reflejarse en el pulido suelo de la sala, catalizadores de la máxima atención mediática (la cima del mundo) momentos antes de comenzar a bailar a ritmo de la voz de Beyoncé en una escena que recuerda los bailes de apertura de banquete nupcial (la del presidente con todos los ciudadanos), los Obama parecen alcanzar, en unión, un momento extático, mágico, verdadero signo de su coronación global como primera pareja, como sumos mediums en los que el Poder se acaba de encarnar.


No hay comentarios: